
Portland, Maine. El informe de la Guardia Costera sobre el desastre del sumergible Titan que mató a cinco personas en el camino al Titanic dijo el martes que la implosión fue «prevenible«.
La Guardia Costera convocó su investigación de mayor nivel tras la implosión del 18 de junio del 2023 frente a las costas de Canadá. La desaparición del Titán dio lugar a una búsqueda que captó la atención mundial.
No hubo sobrevivientes. El Titán era propiedad de OceanGate, una empresa privada con sede en el estado de Washington. El operador del sumergible, Stockton Rush, director de OceanGate, se encontraba entre los cinco pasajeros fallecidos.
El desastre del sumergible ha dado lugar a demandas judiciales y a pedidos de una regulación más estricta de la creciente industria de expediciones privadas en aguas profundas.
Jason Neubauer, de la Junta de Investigación Marina, dijo que los hallazgos ayudarán a prevenir futuras tragedias.
“Es necesaria una supervisión más fuerte y opciones claras para los operadores que están explorando nuevos conceptos fuera del marco regulatorio existente”, dijo en un comunicado.
Los investigadores descubrieron que el diseño, la certificación, el mantenimiento y los procesos de inspección del sumergible eran inadecuados. Un comunicado de la Guardia Costera indicó que OceanGate también tenía una «cultura laboral tóxica» y que su misión se veía obstaculizada por la falta de un marco nacional e internacional para las operaciones de sumergibles.
Numerosos empleados de OceanGate se han presentado en los dos años transcurridos desde la implosión para apoyar esa afirmación.